Pues hoy me he pasado a recogerlo. Un día de sentimientos raros. Por un lado he dejado mi antiguo CX5 al nuevo propietario, un coche que me encantaba pero no le estaba dando el provecho que necesita un motor diésel. Por otro lado, he recogido el nuevo. Distintas sensaciones al conducirlo. Siento que he perdido algo de amplitud y altura respecto a la carretera. También algo de punch a la hora de acelerar, pero eso es algo engañoso, ya que el nuevo coche responde muy bien, diferente, pero muy bien. La sensación de conducir un CX5 no te la da un CX30, pero he ganado totalmente en suavidad de manejo y insonoridad, así como en tecnología y seguridad. Es una delicia manejar este, digamos, "pequeñín" que creo que me va a reportar muchas alegrías.
En cuanto pueda hacer algunos kms. y pasar el periodo de rodaje autoimpuesto iré comentando sensaciones. No voy a hablar de consumos porque no pienso dejar de disfrutar de él por estirar unos kilómetros el llenado del depósito de gasolina.
Un saludo a tod@s.
En cuanto pueda hacer algunos kms. y pasar el periodo de rodaje autoimpuesto iré comentando sensaciones. No voy a hablar de consumos porque no pienso dejar de disfrutar de él por estirar unos kilómetros el llenado del depósito de gasolina.
Un saludo a tod@s.